Nos vamos a recorrer el centro del país y su selva fantástica que enamora. Tenemos tres días para pasarla entre cascadas, caminos que serpentean, fauna deslumbrante y mucha aventura en la naturaleza por disfrutar. ¿Vienes?
Muchas ganas. Básicamente eso es todo lo que necesitas para distender el espíritu y disfrutar a plenitud de la selva central. Y, claro, también requieres un traslado de fin de semana rápido a Chanchamayo, y un smartphone con el website de Rumbos abierto para no perder la brújula.
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Día 1 senderos verdes
Iniciamos nuestro recorrido en el puente colgante Victoria, luego subiremos por una serpenteante carretera en el sector Alto Toterani, poniéndole una dosis extra de aventura al trayecto con una ruta que bordea senderos boscosos, llegando a lo más alto del distrito de Perené. Allí encontraremos un fabuloso mirador natural llamado Toterani, lugar perfecto para maravillarnos con los admirables paisajes de la selva alta.
Así como el valle del Perené -que se extiende en el horizonte- es un paradisíaco paisaje abrazado por montañas verdes y el sinuoso cauce del río del cual recibe su nombre, así también de fantástico e imponente es el Cañón de Boca Tigre.
Luego de una breve caminata por cultivos agrícolas y la espesura de la selva, llegamos a la catarata Boca Tigre. Partida en tres niveles de 40, 30 y 15 metros que forman abundantes pozas naturales a las que un halo mágico y multicolor rodea. No sólo refresca el cuerpo, sino que también airea la mirada.
Por la tarde visitaremos el criadero de mariposas y centro de rescate de animales Zhaveta Yard, donde seremos testigos de la asombrosa metamorfosis de estos bellos lepidópteros y apreciaremos diversos animales silvestres de selva central.
Día 2: Vértigo y aventura
Partimos hacia el poblado de Kimiri y cruzamos el impresionante puente colgante que nos llevará por una trocha hacia la quebrada Borgoña. En el trayecto se abrirá paso el impresionante paisaje del valle y el majestuoso río Chanchamayo, en cuyas riveras permanece una construcción de la época de la colonización italiana. La visitaremos antes de empezar la aventura.
Caminamos a través de un hermoso sendero dentro del bosque secundario, subimos por el curso de la quebrada, trepamos por escalones rústicos, lianas, raíces, escalamos algunas paredes de roca, a una sorprendente caída de agua y nos divertimos haciendo rappel con refrescantes saltos de agua. Después de haber superado todos estos divertidos obstáculos llegamos por un pared de rocosa de unos 20 metros de alto.
Día 3: selva refrescante
Iniciamos nuestro recorrido en otro puente colgante, luego nos dirigimos hacia Puerto Yurinaki, donde después de una breve caminata conoceremos dos encantadoras y fascinantes cataratas, Velo de la Novia con sus 60 metros de caída dentro del impresionante cañón del río Yurinaki y rodeada de exuberante vegetación. La segunda catarata es Bayoz con más de 65 metros en tres saltos que descienden de la montaña formando una majestuosa caída de agua, con múltiples piscinas naturales ideales para un refrescante chapuzón en aguas cristalinas.
Por la tarde visitamos una comunidad nativa asháninka, donde aprenderemos su historia, disfrutaremos de su música y alegres danzas nativas; finalmente, visitamos una mini planta procesadora de café. Para cerrar con broche de oro, nos metemos al bosque a reconocer frutas y plantas comestibles, por si algún día nos perdemos ya sabremos como salir bien librados. ¡Arma tus maletas ya!
En rumbo:
¿Cómo llegar? Puedes viajar con la comodidad y seguridad de Cruz del Sur en su servicio a La Merced. El viaje toma apenas 8 horas.
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