Las video tragamonedas, también conocidas en el mundo anglosajón como videoslots, aparecieron por primera vez en 1975, cuando se vio que la incorporación de la pantalla en el mecanismo clásico generaba una experiencia de juego más placentera a los jugadores. Este fue el punto de inicio de todo lo que vendría después y que a continuación entraremos a repasar: la aparición de símbolos como los comodines y los scatter, los diferentes modos de juego, la variedad temática o los jackpots progresivos.
En la actualidad, esta nomenclatura hace referencia a toda la oferta que se encuentra en el mundo digital. Mecanismos como las ruedas clásicas fueron sustituidas por botones y permitieron el acceso más rápido y de forma más sencilla al gran público a través de internet. Ya no es necesario estar limitado a un horario o necesitar un desplazamiento físico hacia un lugar concreto para llevar a cabo esta actividad de entretenimiento: es suficiente con el celular o la computadora para hacerlo posible.
Sin esta manera de hacer, no podríamos entender en la actualidad toda la oferta que hay de los juegos online de tragamonedas y los diferentes aspectos que proponen a sus jugadores. En este sentido, la incorporación de las pantallas ha llevado a una mayor creación de títulos de temáticas diferentes hasta alcanzar la cantidad que hoy en día se puede encontrar en el campo digital con cientos de ejemplos. La oferta se ha diversificado y existen opciones para todos los gustos.
Minijuegos y elementos propios
Más allá de las temáticas y la calidad que ofrecen en la presentación de los contenidos, estos títulos digitales abren la puerta a los usuarios de salir de la actividad principal y practicar otros juegos complementarios o minijuegos con los que guardan relación. Esto, que es cada vez más habitual, es un entretenimiento adicional considerado como extra que da la posibilidad de acceder a nuevos premios. De esta manera, se consigue dinamizar la partida y hacer una experiencia más completa.
A su vez, no podemos obviar dos elementos sin los cuales las video tragamonedas actuales no se entenderían. Estos son los comodines o wilds y los símbolos de dispersión o scatters. Respecto a los primeros, son considerados como los más poderosos y buscados, pues permiten sustituir cualquier otro símbolo para crear una combinación ganadora. En referencia al segundo, agruparlos es sinónimo de llevar la partida a otra dimensión y abrir rondas de bonificación en algunos títulos.
Cada vez más, la oferta que se puede encontrar en el catálogo permite lo que se conoce como giros gratuitos. Como su nombre indica, son turnos en los que el usuario no tiene que realizar desembolso alguno y que, en la mayoría de ocasiones, se dan de manera automática. En la actualidad, se ha convertido en una forma recurrente de premiar las buenas combinaciones que aparecen en pantalla y abre la puerta a ampliar las posibilidades de premio.
Diferentes tipos de jackpots
En las tragamonedas online es habitual encontrar diferentes tipos de pozos, el premio que todo jugador quiere ganar al ser mayor que las ganancias habituales. Estos son conocidos popularmente como jackpot y, en varias ocasiones, están muy vinculados al número de giros que se realice o al valor de las apuestas que se hayan ido haciendo. Para hacer uno de estos depósitos, desde hace ya años , se contemplan alguno de los diferentes métodos de pago más utilizados en el campo virtual.
Dentro de este apartado, cabe mencionar dos grandes grupos. El primero hace referencia a los jackpots fijos, donde la cantidad de premios no varía y siempre se mantiene igual. Eso hace que las partidas o veces que se intente no influyan en el número final. El segundo, algo diferente y habitual en línea, son los jackpots progresivos. Su principal característica es que la cantidad va aumentando a medida que se va jugando, ya sea el propio jugador u otros internautas que lo intenten. Una parte de las apuestas van destinadas a incrementar el premio.
